Brasil es un país donde las culturas africanas, asiáticas, árabes y europeas se mezclan en una cultura armoniosa y única, que también brilla a través de la arquitectura, la gastronomía y las tradiciones de sus ciudades.
Si estás interesado en conocer cuáles son las ciudades más bellas de Brasil, a continuación te las presentamos:
Fortaleza
Fortaleza es uno de los balnearios más populares de Brasil. De fácil acceso en avión, disfruta de una posición que lo favorece desde el punto de vista climático. La época ideal para visitarla es de agosto a octubre, las temperaturas medias rondan los 26 grados y los días soleados favorecen las excursiones urbanas y los baños en las aguas de Praia do Futuro, Maireles e Iracema.
Los que prefieren la cultura pueden visitar el Museo de Arte Popular, el de Mineralogía y el de Imágenes y Sonidos de Fortaleza, pero sobre todo la Catedral Metropolitana de San José, que recuerda a la famosa Notre Dame de París.
Rio de Janeiro
Cuando decimos Río de Janeiro inmediatamente pensamos en el Carnaval. Río de Janeiro, sin embargo, también es importante por sus playas. Las más famosas son sin duda Copacabana, Ipanema y Leblon. La ciudad dominada por la estatua del Cristo Redentor alberga varios museos importantes, como el Museo Histórico Nacional, el de arte moderno y un hermoso jardín botánico. La mejor época para visitarla es entre mayo y octubre, cuando las lluvias son muy escasas y las temperaturas rondan los 30 grados.
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San Pablo
Capital del estado homónimo de Sao Paulo, al sur del país, es la ciudad más moderna y poblada de Brasil. Cada año son más los turistas que lo eligen como destino de vacaciones, también por los numerosos eventos que alberga. El período comprendido entre abril y agosto es el mejor desde el punto de vista climático, en el que las temperaturas nunca son excesivamente altas y las escasas lluvias favorecen los viajes largos para descubrir la ciudad. Si te encuentras en la ciudad, debes de visitar el parque urbano de Ibirapuera, el Museo de Arte, la Catedral Metropolitana de San Paolo y el Acuario de la ciudad.
Brasilia
La capital de Brasil, patrimonio de la UNESCO, fue diseñada para que tomara la forma de un avión, superando el concepto anterior de hacer que pareciera una cruz. El cuerpo central alberga los principales edificios administrativos y la ultramoderna Catedral de Brasilia (Nossa Senhora Aparecida).
A los lados y en las áreas norte y sur de la estructura central de la ciudad se encuentran las áreas residenciales. Construida inicialmente sin tener en cuenta el tráfico de peatones, se intentó remediar esta carencia mediante el seguimiento de innumerables pasos de peatones. Sede de importantes universidades, también alberga interesantes atractivos culturales como el Museo de Arte de Brasilia, el Museo de Valores del Banco Central y el Teatro Nacional.
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Jericoacoara
Se trata de un pequeño balneario ubicado dentro de un parque natural, ideal para quienes desean relajarse y alejarse de la confusión. Sin embargo, esto no significa que no se sirva adecuadamente. De hecho, no faltan restaurantes y lugares para divertirse por la noche, así como oportunidades para practicar surf, windsurf y kitesurf. Al ser un destino de playa, el período ideal para disfrutar plenamente de lo que ofrece Jericoacoara es entre julio y diciembre.
Porto Alegre
Porto Alegre es una ciudad del sur del país, caracterizada por un alto multiculturalismo. Llamado el “Brasil europeo”, por su clima más similar al del Mediterráneo, y por el estilo de vida, ofrece atractivos turísticos particulares.
En el centro se encuentran los principales museos y edificios culturales de la ciudad como la Catedral Metropolitana Madre de Deus, la Casa de Cultura Mario Quintana, el espléndido Teatro de San Pedro y las Margs, o el museo de arte de Porto Alegre.
Ideal para pasar un día en el campo, el hermoso Parque Farroupilha, también el centro de sugerentes eventos culturales. Para aquellos que quieran refrescarse también está la Playa de Lami, una playa que rodea un lago de agua dulce ubicado al sur de la ciudad.
De abril a junio los días son calurosos y las lluvias son realmente escasas, aunque la naturaleza alcanza su máximo esplendor en primavera.
Salvador de Bahia
Capital del estado homónimo (Bahía), Salvador de Bahía es apodada la “Ciudad Negra”, porque está poblada principalmente por descendientes de esclavos. La población es muy aficionada a su historia y tradiciones, tanto que no han demolido el antiguo “Pelourinho”, la hoguera donde fueron atados y azotados sus antepasados.
La cocina también está fuertemente influenciada por influencias africanas, de hecho los platos típicos se basan en carnes y pescados, acompañados de arroces y frijoles enriquecidos con especias picantes y extremadamente aromáticas.
El lugar más interesante de la ciudad es el Mercado Modelo, que alberga piezas de arte y artesanías locales.
Así mismo, los amantes del mar podrán pasar momentos inolvidables en la bahía de Todos os Santos y tomar el sol en las hermosas playas doradas de toda la zona costera.